martes, 15 de diciembre de 2009

EL RIESGO DE SER TAXISTA EN EL ALTO


La vida no tiene precio, y un taxista que ha trabajado en las calles de El Alto lo sabe muy bien. Varios de ellos, además de lidiar con fallas habituales de sus vehículos, ya que muchos son adquiridos de “segunda mano”, o la imprudencia de algunos choferes, deben enfrentarse con la delincuencia, a tal grado de que cualquiera puede perder la vida o estar cerca de ello.

Uno de esos casos le ocurrió a Germán Quispe, chofer particular que trabaja en la urbe alteña. “Al conducir con dirección a la zona de Mercenario, dos señores se subieron y llegando me ahorcaron con una soga. Sorprendido por la situación forcejeé y peleé para que no logre robar el coche que manejaba", recuerda y asegura que se salvó por la llegada casual de un compañero.

Como Quispe, cientos son los taxistas que afrontan estos riesgos, el 22 de marzo de este año, Moisés Chambi Blanco, de 24 años, recogió a unos pasajeros de la Ceja con destino a la zona Juana Azurduy de Padilla, en el sector de Río Seco. Cuando pasó por el camino a Laja, cuya carretera es poco iluminada, uno de ellos sacó un arma y le disparó en el rostro.

Los delincuentes, creyendo que había muerto, tiraron el cuerpo a un costado de la vía; pero más tarde Chambi recuperó el conocimiento y fue internado de emergencia en el Hospital Sagrado Corazón, en la zona de El Kenko.

El oficio

La mayoría de los taxistas se dedican a este oficio por la falta de trabajo, y lo hacen sin ganar mucho, incluso, sin un vehículo propio. Así, una jornada de trabajo, que oscila entre las 06.00 y 20.00, salda de 80 a 150 bolivianos, de los cuales 50 le corresponden al propietario del motorizado, 30 se va a la gasolina y el resto es la ganancia del conductor.

René Machicado, quien pertenece al Sindicato Arco Iris, representa uno de esos casos. Con una experiencia de 19 años tras el volante y luego de haber trabajado en el desaparecido Servicio Nacional de Caminos, decidió laborar por su cuenta.

“Actualmente las empresas sólo reciben personal para poco tiempo y no permanentes como antes. Ahora todo es con contratos determinados y no conviene porque no es un trabajo seguro”, indica y añade que éste, además de ser un oficio peligroso, es sacrificado, pues se deben soportar largas jornadas, incluso turnos nocturnos, que es cuando más peligro existe.

Según la Dirección de Prevención de Robo de Vehículos (Diprove) de El Alto, entre febrero y septiembre de 2008 esa oficina atendió diez casos de robo de vehículos con muerte. Casualmente, todos los fallecidos eran choferes de vagonetas Caldina.

5 comentarios:

angelica dijo...

hola mi amigo como esta?
le cuento que yo no me olvido de usted,estuve muy ocupada con mi trabajo
pero ya estoy otra vez descansando
usted me escribio diciendome que mi correo se le habia perdido o algo asi
ahora se lo recuerdo
pequekita@hotmail.com
ojala y me escriba pronto y pues que chismosiemos un rato se cuida mucho
y un fuerte abrazo a su linda bolivia....

Alex Chipana dijo...

El ser taxista nocturno es uno de los oficios mas peligrosos en El Alto, Muchos amigos taxistan son acompañados por familiares o amigos que hacen las veces de copiloto o acompañante. Ser taxista alteño es una "pega" de valientes.

Periodico Digital El Inmigrante dijo...

Creo desde min punto de vista en la ciudad de El Alto aun sigue la delicuencia aveces algunos pillos se hacen pasar por pasajeros, pero es una galardia ser taxista alteño la vida de ellos no esta comprada cualquier momento puede pasarlos algo,deberia ver mas seguridad ciudadana...

raul dijo...

Hola Willy tienes mucha razon, pues el taxista nocturno corre peligro pero tambien puede ser peligroso a la vez, porque tambien asaltan y se dejan asaltar. tiene parece doble filo el ser taxista.

chauuu Willy,

RAUL

admin dijo...

Angélica, gracias por el correo ya le escribir para "chismosear", realmente hay mucho de que hablar. Un beso hasta Colombia.

Álex, muy cierto, la seguridad ciudadana es otro tema que se relaciona con esto.

Vásquez, tu lo dijiste: Seguridad Ciudadana. Me pregunto si el Plan Acero de la FELCC habrá funcionado.

Raúl, gracias por escribir. Así, es creo que todos coincidimos con esto, lo dicen los testimonios y los datos.

Un abrazo a todos